Enviar energía positiva a distancia
La distancia puede ser una limitante en el momento en que sabemos que una persona que amamos precisa de nuestra ayuda, sobre todo en tiempos difíciles.
Así, si problemas económicos, una enfermedad o una decepción amorosa se encuentran aquejando a aquellos a quienes demostramos nuestra preocupación y afecto, es usual que de inmediato busquemos acudir a ellos para consolarlos.
Sin embargo, en tiempos como estos, puede ser un tanto difícil, sino decir que a veces imposible, el asistir con ellos.
Si bien, existen formas en las que podemos obviar la distancia para enviarle a ese ser querido energía positiva que, en tiempos de pesadumbre, siempre es bienvenida.
La energía positiva siempre es un motivo de regocijo y puede suponer un empujón importante para que esa persona tan apreciada termine por superar su situación.
Entonces, ¿cómo podemos enviar energía positiva a distancia?
Lo primero que se debe hacer es el elegir el lugar indicado; es decir, un sitio que nos transmita tranquilidad mental y en donde, de preferencia, no podamos ser interrumpidos por otras personas.
Después de esto, nos colocaremos en la posición más cómoda posible para nosotros, aunque deberemos, así mismo, de mantener la columna vertebral recta.
Hecho esto, procedemos a cerrar los ojos, inhalando y exhalando el aire de forma lenta pero continua y profunda, hasta que nos encontremos en un estado de relajación profundo.
Una vez que nos encontremos en total paz, es el momento indicado para dejar abierto nuestro corazón al ser superior (si profesas alguna religión, entonces será Dios; pero también puede ser el universo, por ejemplo); y agradecerás que te haya guiado y protegido hasta este momento.
Ten en cuenta que en todo momento inhalarás y exhalarás profunda y pausadamente, con los ojos cerrados.
Un buen método es el de visualizar tu corazón como si se tratara de una gota de agua transparente, pura, y también, imagina que en su interior se localizan todas tus memorias.
Ahora, imagina que una gota semejante se encuentra sobre tu cabeza; dentro, se encontrarán aquellas peticiones u oraciones con las que estés agradeciendo y que representan, a su vez, las energías positivas que estás enviando a tu ser querido.
Así, habrá dos gotas de agua, una en tu interior y la otra encima de tu cabeza.
En el siguiente paso, vas a visualizar cómo la gota que se encuentra sobre tu cabeza y que simboliza la energía de tu ser querido baja lentamente hasta tu corazón.
Fusionándose con la gota que se encuentra ahí y que te pertenece; por lo que ambas dan vida a una gota mucho más grande y cristalina, casi brillante.
Ahora es cuando da inicio el proceso de canalización hacia la otra persona.
Por ello, continua respirando de forma pausada y pronuncia en tu interior (o bien, físicamente) la palabra “gracias”, en la siguiente exhalación, di “lo siento”; o bien, “perdón”; y finalmente, en la tercera exhalación, di “te amo” o pronuncia la palabra “amor”.
Puedes repetir este ciclo de 3 pasos cuantas veces consideres necesario. Al finalizar, sólo tienes que pensar que las gotas retornan al lugar en el que se encontraban, agradeciendo al ser superior que te ha guiado y protegido.