Actualmente podemos encontrar siete dioses de la suerte, o dioses de la fortuna.
A los que por todo el mundo se les realiza todo tipo de ofrendas y oraciones con el fin de atraer a nuestras vidas dicha fortuna y buena suerte de la que gozan estos dioses.
Estos dioses de la suerte tienen un origen mítico y comenzaron siendo dioses totalmente impersonales.
Hasta que su popularidad fue creciendo cuando sus efectos se hicieron notorios; muchos de estos dioses son hoy día patrones de ciertas profesiones.
Tabla de contenidos
Origen de los dioses de la suerte
Los siete dioses que conoceremos a continuación son deidades que se han conocido durante más de mil años.
Cada uno con una gran cantidad de seguidores.
Cuando se hicieron conocidos, eran adorados en su mayoría por comerciantes.
Hoy día estos dioses no brindan suerte únicamente a los comerciantes, sino que también podemos encontrar que uno de estos dioses está orientado a las artes, así como otro se inclina hacia las ciencias intelectuales.
Así mismo, en su principio era común que se les rindiera culto de forma individual.
Pero hoy día, generalmente el culto se realiza en nombre de los siete dioses, a menos que se requiera que el Dios actué en nombre de quien le pide.
Es importante destacar que el origen de estos dioses de la suerte tiene lugar en el hinduismo indio, específicamente tres dioses de ellos, siendo Benzaiten, Bishamonten y Daikokuten.
Por otra parte, otros tres dioses tienen su origen dentro del taoísmo y budismo chino, siendo ellos Fukurokuju, Hotei y Jurojin; mientras que el último Dios tiene su origen en la cultura japonés : Ebisu.
Son muy conocidos de los japoneses y ancrados justamente en la cultura japononesa.
Debemos destacar que es muy frecuente encontrar la imagen de estos dioses de la suerte en un barco, muy similar a la imagen de arriba; esto se debe a lo que muchos conocen como la leyenda del Takarabune.
Según esta leyenda, estos dioses de la suerte se embarcan en un viaje en el Takarabune desde los cielos para llevar tesoros típicos del folclore hacia los puertos humanos; estos tesoros son prendas de vestir con poderes mágicos.
Este viaje que realizan los dioses suceden los tres primeros días de cada año, por lo que la superstición en torno a ella ha crecido al punto de que hay quienes colocan una imagen de estos dioses bajo la almohada el segundo día del año.
¿Y cuáles son estas Deidades de Poder?
HOTEI
Como mencionamos, este dios de la suerte pertenece al taoísmo y budismo chino.
Se trata de un Dios que provee abundancia y salud que también es conocido como el Buda Sonriente.
También se le atribuye la felicidad y la prosperidad de los negocios, siendo muy común que su figura se encuentre en la entrada de los negocios, así como también se le considera el guardián de los niños.
Se trata de un dios calvo muy gordo y con una cara muy sonriente.
El lleva una túnica con un rosario y, en ocasiones, es posible encontrarlo llevando un saco con sus pocas pertenencias, representando la felicidad incluso en la pobreza.
JUROJIN
Este dios se la suerte es el más anciano de los dioses de la suerte y es aquel que representa la longevidad y la vejez.
(esto último también aplica en la mitología del budismo japonés).
Así mismo, se dice que este dios se basa en una persona real.
Dicha persona vivió en la antigüedad con aproximadamente 1.82 metros de alto y con una cabeza alargada.
Este dios se encuentra representado con una barba larga y blanca montado en un ciervo y en ocasiones, acompañado de una grulla y una tortuga.
Él puede encontrarse representado bajo un melocotonero.
Jurojin se encuentra vestido con ropas chinas y, no importa cómo se encuentre, siempre lleva un pergamino y un bastón para representar sabiduría.
El poder de este dios se encuentra orientado a la ciencia, siendo el patrón de los profesores, los científicos, los matemáticos y maestros debido a su representación que inspira sabiduría.
FUKUROKUJU
Conocido como el dios de la felicidad, la longevidad, sabiduría, la suerte y la riqueza.
Entre las virtudes que se le atribuyen, este es uno de los pocos dioses que podían vivir sin comer en la China antigua.
Es el único dios con poder de resucitar a los muertos y se representa con un largo bigote y una frente prominente.
Se encuentra además con un libro sagrado donde están los años que vivirán las personas.v
BISHAMONTEN
Este dios es el dios de los guerreros, así como se considera el dios de la bondad, la fe y en ocasiones es utilizado como un símbolo de autoridad y de dignidad.
Este dios se encuentra vestido con una armadura y casco.
En una mano lleva una lanza, la cual lo convierte en un perfecto guardián contra la maldad.
En la otra mano lleva una pagoda que se encarga de simbolizar la prosperidad.
Muchas personas lo utilizan para proteger sus espacios.
BENZAITEN
Conocida también como Benten, es una diosa que se encarga de representar el conocimiento, la música, la literatura y las artes en general, siendo la única mujer del grupo.
Ella porta una belleza única y se representa con un biwa.
Generalmente su figura se encuentra en los templos de Japón cercanos al mar y también puede representarse en compañía de una serpiente blanca, la cual, para el japonés, es de buena suerte.
DAIKOKUTEN
Este dios de la suerte es el del comercio y de la felicidad, encontrándose representado en ocasiones con Ebisu, quien es su padre.
Este dios se caracteriza por ser gordo y sonriente, además de llevar un gorro (como el de un cazador).
Esta imagen también puede verse acompañada de un saco repleto de objetos de valor, siendo sostenido por una mano, mientras que en la otra puede llevar un mazo de la suerte.
Él es dios de los cocineros, banqueros, financieros y hombres de negocio.
EBISU
Este es el único dios japonés de los dioses de la suerte que, además de representar a los pescadores, también simboliza la riqueza, la fortuna y los negocios.
Generalmente podemos encontrarlo vistiendo un sombrero alto de pescador.
También lleva consigo una gran caña de pescar en la mano derecha, mientras que en la mano izquierda lleva consigo un pez pargo de color rojo y de gran tamaño.
El cual simboliza la abundancia en la comida.